El 16 de agosto de 2009 Usain Bolt se convirtió en la persona más rápida del mundo batiendo el récord de 100 metros lisos en 9,58 segundos. Obviamente, este récord no hubiera sido posible sin horas de dedicación y de esfuerzo por parte del atleta, aunque tampoco lo hubiera sido si un equipo de ingenieros no hubiera diseñado unas zapatillas tan ligeras y aerodinámicas que le permitiera vencer a sus competidores. Del mismo modo que con las deportivas, fue necesario que fisioterapeutas prepararan a conciencia cada músculo del corredor, y que psicólogos le ayudaran a asimilar cada uno de sus movimientos en la dura competición. Entre todos estos factores existe un denominador común: ciencia. Es este, el ámbito del deporte, donde la ciencia ha logrado un gran avance si lo comparamos con años atrás.
Nadie puede negar que con la aparición de las nuevas tecnologías la cantidad de datos generados ha incrementado exponencialmente. Seguro que esta frase no ha causado en ti el mínimo impacto, ya que ha sido empleada en noticias, post y estudios hasta la saciedad. Pero… ¿Y si te decimos que el 90% de los datos existentes han sido generados en los dos últimos años?
El pasado martes 8 de Septiembre, TEDxBarcelona volvió con fuerza tras las vacaciones. Un fabuloso Mazda Space acogía más de 200 personas: algunas, nostálgicas de los eventos mensuales y otras, primerizas, atraídas por un tema que iba a dar mucho que hablar. Rápidamente iban llegando los asistentes, personas de muy variadas profesiones, con infinitos intereses y pasiones pero sobre todo, con muchas ganas de compartir. Ideas, experiencias… estaba todo por venir.
Articulo sobre la necesitad de renovamento del sistema educativa y el "modelo" César Bona.
Imagínate que un amigo te invita a una fiesta en la que no conoces a nadie, por lo que probablemente no sepas qué hacer o con quién hablar… ¿Irías a esa fiesta? La mayoría de personas ante esta situación se echarían atrás por miedo a estar incómodos. ¿Cuántas veces has pensado en cómo sería tu vida si no tuvieras miedo? Lo que nos condiciona no es el miedo a las brujas o los monstruos, sino aquellas barreras que nosotros mismos creamos y que no nos permiten vivir la vida al máximo. Estas limitaciones te impiden ir a hablar con aquella persona que te ha parecido interesante, hacer esa sugerencia delante de tu jefe en una reunión de negocios o incluso pedir una cita a esa chica que te hace tilín desde tiempos inmemoriales.
El coworking se ha convertido en los últimos años en una tendencia mundial que se lleva a cabo sobretodo en las grandes ciudades. Como bien sabes, este método de trabajo consiste en compartir espacio físico y recursos tecnológicos con otras personas o empresas para trabajar de un modo flexible y multidisciplinar como nunca se habia visto hasta el momento.
¿Te has preguntado alguna vez como sería poder comunicarte con la mente? Ni miradas, gestos o palabras; una conexión “cerebro a cerebro” mediante la cual depositar tus pensamientos en la mente de otra persona ¿Crees que esta escena escena sólo puede pertenecer a una película de ciencia ficción? Pues, sorprendentemente hoy en día, la telepatía es posible.
Desde ese capricho tonto de existir, el ser humano se ha movido por un intenso deseo de conocimiento, una sed inextinguible de saber, de explorar. Superando sus límites cada día, empujándose a sí mismo siempre un poco más allá. Por ello, los grandes viajeros, los científicos, y también los artistas, están de alguna manera conectados. Viven en ese universo de ideas y experiencias propio de las mentes inquietas. Justo en ése en el que parecen no existir la pasividad o la pereza. Uno en el que todos pueden (porque quieren) apoderarse de la vida, hacerla suya y plasmarla a su antojo y nuestro disfrute.