Baños públicos sin género
Fuente: The Odyssey Online
“Hay algunas cosas que todos necesitamos. Todos necesitamos aire para respirar. Necesitamos agua para beber. Necesitamos comida para alimentarnos. Necesitamos cobijo y amor. Y todos necesitamos también un lugar seguro para hacer pis.”
Así empieza la TED Talk de Ivan Coyote en TEDxVancouver hace unos meses. A lo largo de su discurso, Ivan Coyote argumenta de forma sincera y contundente la necesidad de cambiar la concepción actual acerca de los servicios en lugares públicos, segregados por sexos.
Las personas transgénero cada vez reciben más atención en los medios de comunicación – como ejemplo mediático contamos con el caso de Caithlyn Jenner, el patriarca/matriarca de la familia Kardashian-. Sin embargo, estas celebridades no experimentan los retos que las personas ordinarias tienen que enfrentar en su día a día. Según la experiencia de Ivan Coyote, sitios como los baños públicos o los vestidores son los lugares que más situaciones potencialmente peligrosas presentan para este colectivo.
Los espacios comunes en el que las personas son segmentadas según su género, causarán verdaderos problemas a todas aquellos que no se identifiquen de forma plena con uno de ellos. Ivan Coyote es un transgénero, por lo que no puede ir al vestidor femenino (tiene apariencia masculina), pero tampoco al masculino (no tiene órganos genitales masculinos). Escoja una u otra opción se enfrenta a situaciones incómodas, reprimendas e incluso agresiones.
Bathroom Bills
El tema de los servicios sin género (o “género neutral”) viene causando mucho revuelo en la sociedad americana, dado que los sectores más conservadores en varios estados de EE.UU. han presentado propuestas de leyes dirigidas a obligar a todos a utilizar el baño correspondiente al sexo con el que nacieron. Aunque muchos ven en estas normas un intento de proteger a los más pequeños ante situaciones tan graves como la pedofilia, otros afirman que es sólo un método más para fomentar lo que se conoce como “transfobia”.
Hace poco saltó a los titulares el caso de Corey Maison, una niña transgénero cuya fotografía se volvió viral con el mensaje siguiente: “¿Si ella fuera tu hija, te sentirías cómoda mandándola al baño de los hombres?, yo tampoco”. En la imagen se ve lo que sin ninguna duda parece una niña, aunque en realidad Corey nació como un chico. Todo post relacionado con este asunto se inundó de mensajes y opiniones que ilustran las dos posiciones acerca de la materia.
Hay muchos sectores que por motivos religiosos o morales no aceptan la existencia de personas transgénero, y lo consideran un fenómeno social a erradicar. Muchos de ellos se escudan en el argumento siguiente: si un hombre se viste como una mujer, alegando que se identifica con el género femenino, puede entrar impunemente en el baño de mujeres y llevar a cabo conductas reprobables. Pocos de ellos aciertan a ver que este argumento es altamente sexista, puesto que nadie parece asustado de que una mujer vestida como un hombre pueda entrar en el servicio de hombres. Además, este argumento pone el foco del peligro en hombres heterosexuales, y no en personas transgénero.
Por otro lado, en estos hilos también abundan mensajes positivos, que, lo comprendan o no, aceptan que la existencia de personas transgénero es una realidad y hay que darle cabida en la sociedad actual. Muchos muestran su apoyo apelando al respeto y la empatía hacia aquellos reconociendo que son personas que por un motivo u otro sufren. Ellos entienden que todo individuo puede identificarse con uno u otro género (o ninguno) y que nadie merece ser juzgado o discriminado por ello. Algunas compañías famosas, como Target, han emitido comunicados afirmando que permitirán que toda persona use los baños y probadores que correspondan con su identidad de género.
La solución propuesta
Ivan Coyote propone la creación de baños neutrales o – lo que vendría siendo los baños mixtos de toda la vida, cerrados y compartimentados para que cada individuo tenga su intimidad sin tener que pasar por un aprieto.
Además, esta opción aportaría un lugar seguro no sólo para las personas transgénero, si no también para todo aquél que sufra de problemas de imagen corporal o complejos, para personas discapacitadas o que, en general, necesiten ayuda para ir al baño, o para madres con niños y padres con niñas que tengan que cambiarlos.
Una tienda perteneciente a la cadena Kroger situada en Georgia, EE.UU., decidió que esta solución era la adecuada. En consecuencia, colocó este cartel en sus baños, ganándose la simpatía de millares de partidarios en las redes, y también despertando el recelo de muchos opositores.
Fuente: Fox5Atlanta
Como Ivan Coyote afirma al final de su charla, “no podemos cambiar las mentes transfóbicas de la noche a la mañana, pero lo que sí que podemos hacer es proporcionar a todo el mundo un lugar para cambiarse de manera que podamos trabajar por un mundo más seguro para todos”.
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